A medida que pasaban los modelos otoño-invierno 2010, mi mandíbula caía y caía hasta más allá del centro de la Tierra e infinitos signos de pregunta poblaban mi mente.
Veía los vestidos, los sombreros y la única explicación más o menos lógica que encontraba a los diseños era un efecto post consumisión de LSD en cantidades industriales.
Me imaginaba a cualquier mujer argentina viajando en el colectivo 60 a eso de las cinco y media, seis de la tarde con alguno de estos modelos y las cuentas no me cerraban para nada.
Tal vez esto sea el último grito de la moda pero aún asi pienso quién puede ser tan valiente como para ponerse estas cosas?
Vayamos desempolvando la budinera y el colador porque para el año próximo se vienen con todo! :P
8 comentarios:
Siiiiiiiiiiiiiiiii!!!!
Totalmente!!!!
Se fumò un àcido de acà a Mongolia!!!
jajajajjjjjj
P.D.:Pero debo hacer menciòn a parte a esos brishitos para los labios que tiene con sabores y colores que estan para que te partan la jeta en catorce!!! :P
jajajajajajjjjjja
BESAZOP
mi monitor anda mal o es el buen gusto el que se rompió?
Gabu: Hasta los brishitos no llega mi conocimiento sobre la causa De La Prada pero me queda claro que el ácido traba la polea de una forma atroz!
Zorgin: Vengo a llevar tranquilidad a su bolsillo. El monitor anda de maravillas pero el buen gusto está anémico.
Trabajos como los de esta buena señora, me impulsan a lanzar mi meteórica carrera como diseñador. Si ella puede, todos podemos.
Coincido con don Hipólito, además Agatha debe mirarme de reojo y pensar que yo en diseño soy como el hombre de Neardenthal a la actualidad.
Hipólito: Puedo encargarte el primer diseño o pensás que es demasiado pronto? :D
Dosto: Pero después de ver lo que ella hace eso es lo que menos debería preocuparnos, verdad?
Todavía no he terminado mi colección de invierno, me están faltando sobrecitos de té y latas aplastadas.
Hipólito: Puedo contribuir con los sobrecitos de té, las latas se las debo.
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